ITUZAINGÓ- En las últimas horas, y como parte de una gran cantidad de secuestros que se vienen sucediendo, un comerciante textil de 53 años fue secuestrado cuando llegaba a su casa en Parque Leloir, partido de Ituzaingó. Los delincuentes lo tuvieron cautivos durante varias horas y luego de cobrar un rescate de 10 mil pesos lo liberaron.
Fuentes policiales aseguraron que tras la liberación de la víctima, efectivos de la policía bonaerense cruzaron el paso de los secuestradores y mantuvieron un intenso tiroteo, tras el cual los delincuentes abandonaron la camioneta del hombre secuestrado y escaparon corriendo, sin que pudieran ser atrapados.

Este episodio se produjo casi de manera simultánea a otro secuestro extorsivo de un niño de 10 años que fue liberado esta madrugada cuando se hallaba maniatado por sus captores en un hotel del barrio porteño de Constitución.
El hecho comenzó anoche cuando el comerciante, identificado por fuentes policiales como Carlos Griner, llegaba a su casa a bordo de una camioneta importada Honda HRV y fue sorprendido por alrededor de cinco delincuentes que lo amenazaron con armas y se lo llevaron cautivo.
Fuentes policiales dijeron que tres de los delincuentes se subieron con él dentro de su camioneta Honda y al menos otros dos se movilizaban en otro vehículo que estaba de apoyo detrás.
Inmediatamente, los captores comenzaron a realizar las llamadas extorsivas al hijo del comerciante, quien vive en el barrio porteño de Núñez, y le exigieron una suma de dinero como rescate.
Este joven, tras el segundo llamado extorsivo y con la negociación ya encaminada, se comunicó con el teléfono de emergencias policiales 911 y denunció el secuestro, por lo que comenzó a trabajar la División Antisecuestros de la Policía Federal y el fiscal federal porteño Carlos Stornelli, los mismos que estaban investigando al mismo tiempo el rescate del chico secuestrado en la Capital Federal.
El jefe de la Dirección General Antisecuestros, Trata de Personas y Búsqueda de Personas de la policía Federal, comisario mayor Raúl Brítez, aseguró a Télam que la intervención policial comenzó «cuando la negociación por el pago del rescate ya estaba en curso y el hijo estaba saliendo a pagar».
Por eso, el hijo del comerciante finalmente pactó un pago de diez mil dólares como rescate para la liberación de su padre y los secuestradores lo obligaron a dirigirse por la autopista del Oeste hacia la zona de Morón.
«En cierto momento, los secuestradores le hicieron arrojar una bolsa con el dinero junto a la banquina del acceso Oeste, en el límite entre Morón y Merlo», dijo a Télam un jefe policial que trabajó en la pesquisa.
El comerciante secuestrado fue liberado pocos minutos después, unos 800 metros más adelante del lugar donde se concretó el pago, sobre la autopista del Oeste.
Según los investigadores, efectivos de la policía bonaerense que ya estaban buscando la camioneta Honda del comerciante observaron el paso de la misma por el partido de Merlo y comenzó una intensa persecución que se extendió por unas cuadras.
Fuentes policiales explicaron que se originó un fuerte tiroteo entre policías y delincuentes hasta que finalmente los secuestradores abandonaron la camioneta y escaparon a la carrera.
La camioneta quedó con varios impactos de bala y fue analizada por peritos en rastros en busca de huellas dactilares de los secuestradores.
Además, analizaban las cámaras de seguridad de los peajes de la Autopista del Oeste para intentar observar el paso de la camioneta y de algún auto que pudiera haber actuado como apoyo de los secuestradores.
En las próximas horas, el hombre secuestrado declarará ante el fiscal federal Stornelli.
El comisario mayor Britez explicó que «si bien los autores están prófugos, la dirección general Antisecuestros va a seguir trabajando y vamos a dar con ellos».
Además, el jefe policial agregó que «la víctima está bien de salud, pese al estrés que causa un hecho de estas características», negó que haya un aumento de casos de secuestros extorsivos y aclaró que, a su criterio, la captura del comerciante fue «al voleo».