LA PLATA- La CTA bonaerense y la agrupación Quebracho marcharán hoy a la Legislatura bonaerense en momentos en que se trate el proyecto de reforma tributaria, la primera en respaldo de la iniciativa y la otra por reclamos sociales, por lo que coincidirán con una nueva manifestación de los productores que se oponen al incremento impositivo.
La Cámara Diputados provincial comenzará a tratar a las 11 de mañana el proyecto enviado por el gobierno provincial, que ya cuenta con media sanción del Senado.
El debate en la Cámara baja debió suspenderse la semana pasada luego de que manifestantes de las entidades ruralistas se enfrentaran con militantes de La Cámpora.
El titular de la CTA provincial y dirigente docente, Roberto Baradel, anunció esta mañana que su organización se concentrará mañana frente al Palacio Legislativo, pero aseguró que no se van «a manifestar en contra de nadie sino a favor de sostener una decisión del gobierno de la provincia de dar un pequeño paso en una reforma tributaria que se tiene que dar».
El dirigente expresó el respaldo al proyecto tributario enviado por el gobernador Daniel Scioli porque «la provincia necesita más recursos que tienen que salir de los sectores de mayor capacidad contributiva».
En declaraciones a radio Provincia, consideró que la reforma tributaria es «módica y necesaria», al tiempo que repudió «la actitud antidemocrática» de la Sociedad Rural Argentina, al señalar que «cada vez que se pretendió cobrarle más impuestos al sector, esta entidad reaccionó de igual manera, al punto de intervenir en todos los golpes de Estado como parte fundamental», sostuvo.
Por su parte, el líder de Quebracho, Fernando Esteche, aseguró que la decisión de su organización de movilizarse mañana la habían «tomado varias semanas antes» y advirtió: «Espero que ni el gobierno ni los ruralistas se metan con nosotros».
Al explicar los motivos de la movilización, sostuvo que «hace dos meses que no se pagan los planes Jefes de Hogar», aún cuando son de «un nivel de miseria alarmante porque son de 150 pesos», al mismo tiempo que el gobierno, dijo, «sigue recortando alimentos en los comedores».
«Todo este ajuste en el marco de un tipo (por el gobernador Scioli) que días atrás anunció que quiere ser presidente. Este es el país que nos espera», manifestó.
La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Federación Agraria Argentina y CONINAGRO se convocaron nuevamente en la plaza San Martín, frente a la Cámara de Diputados provincial, para reiterar su rechazo a la iniciativa que ya cuenta con la aprobación del Senado.
Los productores consideran la medida un «zarpazo fiscal» y afirmaron que, en caso de ser aprobada, «se incrementarán las valuaciones fiscales de los campos en más del 1300 por ciento».
El proyecto, resaltaron, prevé «aumentos superiores en algunos casos del 300 por ciento en el Inmobiliario Rural y subas en impuestos nacionales como Bienes Personales y Renta mínima presunta de más del 600 por ciento».
Las entidades ruralistas advirtieron que de esta forma, con «un excesivo incremento de un menú de impuestos nacionales», habrá una «enorme transferencia de dinero desde las comunidades del interior productivo hacia la Nación, con un retorno mínimo» a los distritos bonaerenses.
Por su parte, el ministro de Asuntos Agrarios provincial, Gustavo Arrieta, justificó la reforma tributaria al señalar que «hay una distorsión absoluta de los valores del Inmobiliario Rural» y recordó que «hace 15 años que no se realiza ningún tipo de revalúo sobre las propiedades rurales en las tierras, a diferencia de las propiedades urbanas que fueron revaluadas seis veces durante los últimos 10 años».