LA PLATA- Con apoyo de un sector de la oposición, logró sancionar la norma en Diputados y Senadores luego de que Scioli decrete el revalúo de campos
El gobernador, Daniel Scioli, ya había firmado el decreto sobre el revalúo de las tierras rurales de la Provincia, para «captar la real capacidad contributiva y consolidar la equidad del sistema tributario».

«La correcta valuación fiscal de los inmuebles permite captar la real capacidad contributiva y de esta manera consolidar la equidad del sistema tributario provincial, eje central en la política del gobierno», argumentó Scioli al fijar los nuevos valores de la valuación fiscal de la zona rural en la Provincia.
El decreto faculta a la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA) a aplicar a los tributos pendientes, «la base imponible, las escalas y alícuotas fijadas por ley», así como también le permite ôdictar las normas y procedimientos complementarios que resulten necesarios para la debida implementaciónö del revalúo fiscal.
El gobernador sostuvo, entre los fundamentos del decreto, que «la falta de actualización del valor de la tierra rural es un problema estructural de la provincia», y recordó que «la única valuación fiscal importante fue realizada en 1955, en oportunidad de llevarse adelante el primer catastro».
«Esto se ha traducido en la utilización, por parte de los gobiernos provinciales, de coeficientes zonales de ajuste que provocan importantes distorsiones al impuesto, eliminando su progresividad», agregó.
Scioli remarcó que «por ello, se estimó conveniente abordar de manera integrada e integral por primera vez en la historia de la provincia, la fijación de los nuevos valores unitarios básicos en base a lo informado y respetando sin ningún tipo de interferencias los estudios técnicos realizados por la autoridad de aplicación junto con la determinación de la base imponible, escalas y alícuotas para el presente ejercicio 2012».
Luego de ello le siguió una maratónica jornada que culminó cuando la Cámara de Diputados y el Senado sancionaron el proyecto de ajuste fiscal, que contiene incrementos en impuestos a los Ingresos Brutos, Inmobiliario Rural y Sellos y una autorización para que el Ejecutivo tome deuda.
Como en las últimas semanas, las entidades del agro volvieron ayer a manifestar su rechazo a la norma frente a la Legislatura. Convocadas por Carbap, Sociedad Rural y la Federación Agraria, los productores se concentraron en Plaza San Martín. Por la tarde, se registraron algunos incidentes cuando un grupo de manifestantes arrojó huevos al edificio del Senado.
En líneas generales, el ajuste posibilitaría al Ejecutivo recaudar unos 2.685 millones de pesos anuales, de los cuales unos mil millones se distribuirán entre las comunas. No obstante, como es obvio, el mayor ingreso que posibilitará este año se reducirá a la mitad de esos montos.
Ayer, en medio de las negociaciones Alberto Pérez, había defendido la reforma impositiva que impulsaba el gobernador, Daniel Scioli, y asegurado que “el 62% de los productores no van a sufrir modificaciones e incluso van a pagar menos que ahora”.
Pérez adelantó que la nueva ley ayudará a las arcas provinciales con fondos que serán reinvertidos en caminos, puertos y accesos. “Queremos llevar tranquilidad y decir las cosas en su justo término”, precisó.
La Mesa de Enlace agropecuaria de inmediato convocó a un paro que fue ratificado esta mañana por nueve días en la comercialización de hacienda y granos, en rechazo a la sanción de la reforma fiscal.
“La idea no es bloquear las rutas sino manifestar nuestra disconformidad con actos y presencia en distintos puntos del interior del país”, aseguró el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA) Hugo Biolcati.
La medida de fuerza del campo comenzará esta medianoche y se extenderá hasta las 24 horas del domingo 10 de junio. “La no comercialización de hacienda y granos tiene un efecto ante la población que, creo, no se va a notar todavía demasiado, en la medida que esto no continúe”, advirtió el ruralista.
En declaraciones en los medios Biolcati aseguró que “el impuestazo de Scioli tiene un impacto grande que influye en el consumo de todas las familias de Buenos Aires”, aunque se encargó de aclarar que “los productos perecederos quedarán excluidos de la protesta”.
En sintonía con la SRA, se expresó el presidente del CARBAP, Alberto Frola y advirtió que buscarán “la nacionalización del conflicto”. “Esto nació como un conflicto impositivo en la provincia de Buenos Aires pero en realidad el campo tiene un montón de problemas que no se han solucionado”, señaló.
Frola está seguro que como ocurrió con la 125, el sector conseguirá el acompañamiento nacional. “La situación empeoró muchísimo en los últimos meses” indicó el productor y enumeró una serie de factores que están golpeando al sector: “La rentabilidad se ha licuado, hay muchas zonas que ya no pueden producir porque los costos le han subido en dólares y los fletes aumentaron enormemente”.
Sobre la protesta, el presidente de CARBAP señaló en diálogo con Radio Mitre que el reclamo “tiene que ver con la falta de defensa de la producción y el no reclamo de la coparticipación de la provincia de Buenos Aires”, y volvió a reclamar a las autoridades “que se pongan al frente de los reclamos de los productores”.
En tanto, desde el Frente Agropecuario Nacional (FAN), rechazaron el paro. En declaraciones a Radio Del Plata, Horacio Delguy, presidente de la entidad, afirmó que no adherirá a las medidas de fuerza convocadas por la Mesa de Enlace y criticó cómo está planteando la oposición al impuesto provincial.
Para el referente, oponerse a las medidas del gobierno bonaerense, “no es realmente buscar la solución de fondo y representar los intereses de los medianos y pequeños productores”, los cuales “están pasando una situación nada fácil, no por la reforma tributaria sino por otros motivos”.
Sin embargo, reconoció la necesidad de reformularlo y marchar hacia una reforma progresiva donde “paguen los que más tienen y los que más ganan”.
“Nadie puede reclamar justicia cuando un jubilado que gana 1600 pesos está pagando para comer el 21% del IVA”, disparó Delguy. “Hay un error del sector agropecuario cuando reclama en forma corporativa sin ver el conjunto”, criticó el presidente del FAN.